La tecnología LED que ahora todos conocemos, fue desarrollada por el científico estadounidense Nick Holonyak, en 1962
El desarrollo de Holonyak, que vio la luz mientras trabajaba para la empresa de electrodomésticos General Electric, fue una extensión de la tecnología del transistor, un dispositivo electrónico semiconductor por el que pueden transferirse cargas negativas y positivas a la vez.
El diodo emisor de luz de Holonyak tiene una terminal por la que entra la carga positiva y otra por la que entra la negativa. Ambas están separadas por un pequeño espacio donde se da la transición que produce la luz.
Holonyak le explicó a la BBC que se trata de una conversión de energía eléctrica a energía óptica que no implica un proceso intermedio, que es la característica de los procesos de otras tecnologías generadoras de iluminación.
El chip semiconductor está dentro de una pequeña cobertura de resina de color claro, aunque también hay de otros colores. Las dos terminales o cables que se desprenden de la resina generan energía LUMINOSA al conectarse a una batería.
La gran diferencia con un foco infrarrojo es que los LED operan con voltajes muy bajos. Esto hace que esté muy cerca de ser 100% eficiente.
“Con un LED obtienes mucha más flexibilidad”, le dijo Holonyak a la BBC. “Es luz electrónica. No debes esperar a que se caliente. En la parte de atrás de un carro, cuando oprimes el freno, un LED se prende instantáneamente. Y ya no tienes que cambiar los focos”.
El invento de Holonyak, fue un desarrollo en la investigación sobre la tecnología de los láser.
“Mi luz era solo un láser rojo”, le dijo a la BBC. “Fue después de que se desarrollaron las luces anaranjadas, verdes y azules”.
Como dice el blog informativo de la General Electric con motivo del aniversario, “el diodo de Holonyak emitía solo luz roja, pero impulsó un boom de investigación cuyos resultados multicolores ahora iluminan casas y ciudades, la retina de las pantallas de los últimos iPads y televisiones de pantalla plana”.
“Cuando empecé a incursionar en este campo”, le cuenta Holonyak al blog, “no me di cuenta de todo lo que esto iba a generar”.
Pero si bien él no vio venir la revolución, sus contemporáneos sí.
En 1963, Harland Manchester, en ese entonces presidente de la Asociación Nacional de Escritores de Ciencia, escribió en el Reader’s Digest: “Los últimos dramáticos descubrimientos de láser, hechos por la General Electric, pueden un día volver obsoleto el foco eléctrico.